28 marzo, 2011

Alquimia popular

Teme al forastero
enfermo de romance,
perro ciego de celo que te
arroja su deseo a la cara
con el anhelo fuera de ti.

Huye de su tránsito no-gratuito.

Inabarcables como horizontes.
Arden como soles.
Aman crueles como dioses.

Texto: Isabel Tejada Balsas (Bel)

4 comentarios:

  1. Salvo que el forastero te guste, ¿no? :)

    ResponderEliminar
  2. A veces en nueve versos se hace muy difícil concentrar tanto miedo a lo desconocido y a la vez tan atrayente.

    ResponderEliminar
  3. Intenso...como el miedo, como el deseo...a veces.

    Magnífico poema, Bel.

    :)

    ResponderEliminar
  4. Un deseo inespecífico que se satisface con el objeto, no con la persona.

    Bello y certero, un abrazo Á.

    ResponderEliminar

Gracias por contribuir con tus comentarios y tu punto de vista.

Los componentes de La Esfera te saludan y esperan verte a menudo por aquí.

Ésta es tu casa.