- ¡Que llueva, que llueva…! Jajaja… Así crié a la primera. Así edifiqué su mundo. No existía otro.
- ¡Tengo miedo! ¡¡Ahhhh!!… De esa forma me suplicaba, lloraba. Así me comporté con la segunda. Así tinté su existencia. Así esbocé el mundo que le inventé. Su universo, para ella tampoco existía otro.
Las quería de igual manera, de forma infinita. Pero la vida tiene un componente de suerte. A una le tocó el blanco y a la otra el negro. Lo siento mis niñas, mis amores…Es la vida, yo no tengo la culpa.
Cuando ambas supieron de la existencia una de la otra, todo se desmoronó. Ser un Dios irresponsable hace que te derrumbes cuando dejas de serlo. ¿Por qué les tocó a ustedes? ¿Y a mí?
Texto: Francisco Concepción
Narración: La Voz Silenciosa
Texto: Francisco Concepción
Narración: La Voz Silenciosa
Esto de ser dios no es tarea sencilla. Cualquiera piensa que se puede hacer a capricho.
ResponderEliminarJa, porque ellos lo digan
(Después de leer los cuatro textos publicados con fecha de hoy, tengo la impresión de que todos están concatenados de algún modo, con la creación literaria como leit motiv. No deja de ser curioso)
¿Y por qué nos salen cada una con su carácter distinto, que en nada se podría decir que son hijas de un mismo padre o de una misma madre? No es fácil dar con la respuesta y sólo se me ocurre aquel verso de Neruda: "Nosotros, los de entonces, ya no somos los mismos".
ResponderEliminarBuen micro, Francisco.
Un abrazo.
Muy bueno, Francisco, y muy cierto. Qué difícil es ser guía, Dios, vara sobre la que enredar los destinos de nuestros hijos. Esas dos últimas frases en forma de pregunta abierta dejan un halo de impotencia perpetua al terminar de leerlo.
ResponderEliminarEnhorabuena.
No termino de cogerlo,FranCo, estoy espeso.
ResponderEliminarMe pasa un poco como a Marcos, no termino de cogerlo; ¿se refiere a dos hermanas o a otra creación diferente?, pese a no entenderlo muy bien, me gusta el modo en que relatas las contradicciones. Gracias.
ResponderEliminar¡Qué bueno! Nadie vive con total exactitud. No hay otro sitio para aprenderlo que la vida, y mientras lo hacemos nos equivocamos, o sea que...
ResponderEliminarTu historia nos acerca muy bien a esa ciencia inexacta. Saludos Francisco
Imaginemos que un pintor realiza unos trazos, un boceto sobre un cuadro que quiere pintar y lo cuelga en una exposición por capricho. Es el caso de este texto. Un esqueje despreocupado de una posible novela. Una reflexión en voz alta, que busca respuesta.
ResponderEliminarLa experiencia es gratificante. En contra de lo que pensaba, varios han captado su esencia. Me parece increíble. La honestidad también ha florecido al apuntar que no lo pillan.
Gracias a cada uno por sus comentarios.
La publicación en esta Esfera sirve en muchos casos como un interesante test. Esta plataforma se ha convertido en un espacio literario y cultural en el que transitan puntos de vista y opiniones muy a tener en cuenta. Gracias a todos.
Somos uno en cada circunstancia, un "uno" diferente dependiendo de lo que se nos pone delante, nos comportamos sin saber por qué con matices distintos que pueden alterar el transcurso de una educación, de un comportamiento, no podemos ser dioses porque somos humanos.
ResponderEliminarEscribes poco, pero,cuando lo haces, no nos dejas indiferente. Enhorabuena.
Ahora sí.
ResponderEliminarEl artista, también el escritor, busca que su destinatario que reaccione, que no sea indiferente, y una de sus armas es la provocación. Hay que reconocer que tú en eso eres un gran maestro. Enhorabuena.
Debo reconocer que juego con ventaja, al haber llegado tarde y poder haber leído los comentarios de comentaristas y autor.
ResponderEliminarEn mi cabeza se ha formado el guión de una película en la que alguien manipula a dos niñas desde la infancia. Lo que me falta es saber si se trata de un film expresionista o de un culebrón.
Ana J. has dado en el clavo. Me asombras.
ResponderEliminarEllo me lleva a pensar si alguno de los cuadros que tengo en casa son obras terminadas o bocetos.
Los bocetos y trazos en alguna ocasión pueden tener la misma fuerza que la obra.
De las dos opciones que propones prefiero un film expresionista.
La narración en este caso por parte de La Voz Silenciosa es algo más que una interpretación.
ResponderEliminar¡Como agranda este boceto de texto! Lo hace definitivo.
Gracias Jose Francisco.
Un abrazo grande
Es mayor mi satisfacción cada día porque me dais la oportunidad de hacer algo más que leer. Me siento identificado con todas y cada una de las narraciones que aquí leo. Y disfruto dándole algo más. Una parte de mí (debéis saberlo) va en esos audios.
ResponderEliminarCreo que el narrador habla de hijas, pero luego detecto que es un creador. Luego el mundo las hizo diferentes o las seleccionó. Lo que no veo, me despista es ese "Cuando ambas supieron de la existencia una de la otra, todo se desmoronó". Si son obras difícilmente se pueden tener envidias. No sé.
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