ENTREVISTA
La Esfera Cultural inicia una serie de entrevistas a los integrantes de su comité y colaboradores, de la mano de Antonio Guerrero, con el objetivo de ponerles cara y conocerles a cada uno de ellos mejor. La Esfera también tiene rostro.
Amando Carabias, escritor |
A.G.
He visto que sientes predilección por Terencio y por Sócrates, dos
grandes entre los grandes por su autosinceridad. En tu biografía veo
mucho de eso, de sencillez, de honestidad de transparencia. Desde
luego es un buen punto de partida. En tu caso te ha llevado a
plantearte la literatura como un viaje no exento de resultados puesto
que ya has publicado algunos títulos. ¿Por qué no nos hablas de
ellos?
A.C.
Lo
primero, muchas gracias, Antonio por esta entrevista. Ojalá fuera la
centésima parte de sencillez y honestidad de la que hablas.
Bueno,
voy directo a la respuesta. Humanidad
perdida
fue mi primer libro publicado. Un poemario juvenil que me autoedité
con el dinero de mi padre, que nunca me pidió cuentas de él. Es el
primero, y nunca podré olvidarle. Veinte años después, en 2001, la
Diputación de Segovia (donde trabajo) me editó la novela Aquel
sábado lluvioso
que es una reflexión sobre la muerte, y que cuelga, por así decir,
de un punto y aparte del evangelio de San Juan; esta ficción se
desarrolla entre el momento en que Jesús es enterrado y el instante
en que Juan y Pedro acuden a la tumba vacía. No es un libro
heterodoxo, ni siquiera polémico, es mi visión sobre un asunto que
a todos los hombres nos concierne, pues bien sabemos que un día
hemos de morir. En 2004 publiqué (volví a autoeditarme con la ayuda
inestimable de dos amigos) una colección de relatos largos, Cuentos
de Euritmia.
Euritmia es el nombre de una ciudad de ficción, que se parece a
Segovia,
como una gota se parece a otra. En 2011 publiqué mi segundo
poemario, Versos como carne,
fruto de mi experiencia bloguera, pues en el libro se recogen poemas
publicados en mi blog. Y por último (hasta el momento) en el mismo
2011 dimos a la luz Oscurece en Edimburgo.
Una novela fascinante por cuestiones literarias y personales.Caricatura de Amando. Autor José Orcajo. |
A.G.
Tu último proyecto es, sin duda el de 7 plumas, que te ha llevado a
participar en esa sensacional novela compartida.¿Cuáles son tus
impresiones al respecto?
A.C.
Responder
a esta pregunta sin ser totalmente parcial, subjetivo y, en
apariencia, exagerado, es imposible y además ni siquiera deseo
intentarlo.
Entré
en el proyecto por un impulso casi irreflexivo. Me apetecía una
aventura de este tipo. No había habido experiencias similares que
hubieran concluido de un modo satisfactorio. Y menos aún en el
ámbito de Internet. Escribir una novela en la que trama y personajes
fueran construcción colectiva era (y sigue siendo) una aventura cuyo
éxito no es sencillo. Es decir, la propuesta de FranCo era como
apuntarse a una expedición hacia territorios completamente
desconocidos. Eso lo vi de inmediato, desde que hizo la sugerencia en
un comentario a un relato por entregas que estaba publicando Marcos Alonso. Pero tal intuición quedó confirmada cuando se acordaron las
bases del proyecto que se redujeron (como todos nuestros seguidores
saben) al orden de publicación y los días en que debíamos hacerlo.
Lo demás se dejó al libre albedrío de cada uno de los miembros.
Como escritor, pues, me asomaba a un territorio diferente, atractivo
y del que podría sacar múltiples beneficios.
Pero
todo lo anterior, con ser importante, no es lo más importante.
El
hecho de que se publicara en blog abierto a la participación de los
lectores, era el componente más novedoso de la experiencia. Se dice
que Dickens, cuando publicaba sus novelas por entregas a través de
prensa británica, estaba muy atento a los comentarios que los
lectores iban haciendo del proceso de su obra. Pues bien, nosotros
hemos contado con esa participación en tiempo real, con posibilidad
de dialogar con los lectores y recibiendo aportaciones concretas que
han tenido su repercusión en la propia obra.
Pero,
aún así, hay algo todavía más importante y que más me ha marcado
desde el inicio de la escritura del texto: conocer, colaborar y
trabar amistad con seis personas magníficas se mire por donde se
mire. Y esto lo puedo decir alto y claro, porque nuestra relación no
se limitó a la escritura on-line
de la novela, sino que nos hemos visto en otros lugares como, por
ejemplo, Las Palmas, Zaragoza, Lleida, Segovia, aunque no siempre
todos juntos, por desgracia, salvo una ocasión en Zaragoza.
Amando Carabias en la presentación de la novela "Oscurece en Edimburgo", con la escritora y también integrante del comité de La Esfera, Anabel Consejo |
A.
G. ¿Cómo fue el modus operandi de la ejecución del proyecto?
Imagino que entrelazar diferentes estilos fue difícil.
A.C.
Como
he explicado más arriba, el modus operandi fue sencillo: uno sabía
que le tocaba escribir y publicar su capítulo a continuación del
que había publicado, en mi caso, Dácil Martín. El resto era leer,
no sólo el relato (lo más importante) sino los comentarios que en
el blog se iban publicando. Como solemos decir, cada uno de nosotros
era en una séptima parte escritor, las otras seis partes se
correspondían a la de un lector, si se quiere un lector especial,
pues sabía que le iba a tocar coger la péñola y añadir algunas
líneas a la historia.
Como
dices, a priori entrelazar diferentes estilos parecería lo más
complicado. Sin embargo en este caso no lo fue. Y para ello hay una
razón que me parece que forma parte de los cimientos de todo el
proceso. O dos si se quiere. Por un lado tener clara conciencia de
formar parte de un equipo, de no pretender imponer tus criterios (ni
estilísticos ni para el argumento), sino adaptarse como el agua se
adapta al recipiente que lo contiene; o dicho de otro modo: escribir
con clara conciencia de que se escribe para el crecimiento de una
historia. Por otra parte (aunque parezca una paradoja), saber que se
contaba con total libertad para establecer un determinado rumbo, o
dar un viraje en cualquier capítulo.
Además,
en un momento determinado, la historia cobró tal poder y densidad
que fue ella misma la que nos obligó. Y casi como por arte de magia,
las diferencias de estilo no fueron divergencias, sino pluralidad
enriquecedora. En el prólogo de la novela se establece el símil con
la música coral. Cada cuerda (sopranos, contraltos, tenores,
barítonos, bajos…) es diferente y tiene sus propias
características; pero cuando se escucha una pieza coral bien
interpretada, el oyente no cae en la cuenta de las diferencias, sino
que percibe la armonía y belleza del conjunto que no podría ser el
mismo sin la aportación de cada tonalidad. Por tanto, lo que a
priori era una dificultad, se convirtió en uno de los mayores
valores de la obra.
A
.G. ¿Habrá algún proyecto similar en el futuro?
A.C.
Sin
duda. Al menos yo sigo dispuesto a colaborar con mis compañeros, o
con otros amigos que han aparecido en el horizonte ‘esférico’.
Supongo que nada será lo mismo, pero siempre y cuando el tiempo y
las fuerzas lo permitan, y siempre y cuando ellos no se opongan, con
Ana Joyanes, Anabel Consejo, Dácil Martín, Francisco Concepción,
Inma Vinuesa y Marcos Alonso, me iría al fin del mundo. Y si ellos
proponen la inclusión en el equipo de nuevas plumas, yo me fiaré de
su propuesta. De hecho, como bien saben todos nuestros lectores de
“La Esfera Cultural”, aunque no del mismo tipo, los proyectos
colectivos no han cesado desde entonces.
A.
G. Y en lo personal... ¿tienes algo mascullando en tu interior que
aspire a convertirse en otra edición impresa?
A.C.
Como
suelo decir (y quienes me conocen bien, bien lo saben), mi verdadera
pasión es la de la escritura. Y sí, tengo algo, pero incluso más
que mascullado. Hasta que no se concreten los proyectos no conviene
dar más detalles, porque tal y como está el mundo editorial no
conviene anticiparse.
A.
G. Tu colaboración con "La Esfera Cultural" es algo muy
referido por ti. Sospecho que los lectores querrán saber como se
establece la misma.
A.C.
Mi
primer contacto con el “La Esfera Cultural” fue a través de una
persona que en aquel entonces participaba en mi blog. Al poco tiempo,
y por otro canal diferente, fue el propio FranCo quien se puso en
contacto conmigo. Si no me equivoco, a finales de 2009, y desde
entonces participo en las medidas de mis posibilidades en esta tarea
tan gratificante.
Que
haga constante referencia a “La Esfera Cultural” es algo de
obligado cumplimiento, pues siento el blog como algo propio. No algo
exclusivo, sino un hogar compartido, gracias al cual he conocido y
seguiré conociendo a muchas personas. Un hogar que ha servido para
que muchos más me conozcan. Ahora mismo, y sin querer ser exagerado,
o pecar de orgullo, “La Esfera Cultural” es un blog, pero es más
que un blog. Es un proyecto amplio y ambicioso que, sin embargo, se
edifica con tiento y sin prisa, como se construyen las cosas que
importan. Es apasionante formar parte de este grupo, aunque a veces
el tiempo (su escasez, digo) impida más dedicación. Asimismo me
abre cada día nuevas perspectivas y hace que en mí aumente el
espíritu crítico, pues la parte dura de formar parte del proyecto
es la de tener que decidir cuándo un texto se publica o no.
A.
G. La labor que realizamos entre todos es extraordinaria, sobre todo
en los tiempos que corren. Como dijo una amiga mía , en esta crisis
la literatura tiene o debe tener más sentido que nunca.
A.C.
Y
tu amiga tiene toda la razón del mundo. En tiempos como los que
corren, cuando tenemos que transitar por estos senderos al borde
mismo del precipicio por culpa de quienes nos han traído hasta aquí
con manifiestos engaños, robos y otros actos torticeros y dañinos,
nos queda la palabra. Como dijo el poeta, creo firmemente que la
palabra es un arma cargada de futuro. Y aún voy más lejos, me
parece que es la única defensa que nos queda. El poder transformador
del mundo que tiene la palabra es evidente desde siempre, al menos en
nuestra tradición. ¿Alguien puede asegurar que hoy estaríamos
donde estamos sin la influencia incontestable de la religión, la
filosofía o la literatura, al fin y al cabo las manifestaciones más
altas de la palabra? Y qué duda cabe que la palabra que permanece
algo más, que es la palabra escrita, cobra aún mayor necesidad.
Hemos de decir y no callar, hemos de proclamar con contundencia y sin
miedo que es el tiempo del hombre y no de los sistemas. Hemos de
repetir con todas nuestras fuerzas, sin desfallecer, que cualquier
cosa que conduzca a envilecer al ser humano ha de ser cortada de
raíz. La tarea es inmensa, probablemente supere nuestras fuerzas,
pero, por eso mismo, es urgente y es inaplazable.
A.
G. Para finalizar me gustaría proponerte una expresión. ¿Podrías
definirme que sería para ti una atracción zurda -por otra persona-?
A.C.
La
que nace del corazón, pues el corazón está a ese lado.
Qué grande eres amigo Amando!!!!
ResponderEliminarGracias Antonio por traernos más cerca a este magnífico escritor y grandísima persona, del que aprendemos mucho todos los días
Ha sido un placer y un honor abrir el fuego de este ciclo de entrevistas. En realidad, todo se puede resumir en que estando en casa se está como en ningún sitio.
ResponderEliminarSoy un afortunado, y no me cansaré de repetirlo.
Creo firmemente que la felicidad consiste no en aspirar a mucho, sino en disfrutar de lo que se tiene, y en este blog disfruto, aprendo y (lo mejor de todo) he encontrado muy buenos amigos.
¡Enorme Amando!, me ha encantado poder descubrirte un poco más.
ResponderEliminarLa entrevista ha sido buena porque Armando es un tipo genial. Todo es profundo a su lado. Un saludo.
ResponderEliminarEl placer ha ido enorme, tanto para los que te conocemos, como para los que te descubrirán hoy. Antonio Guerrero es un entrevistador que sabe cómo hacer para que expreses, mejor si cabe, lo dicho tantas veces. Amando, eres muy buen escritor y mejor persona y tu palabra permanecerá, pese a todo, como dices en el último párrafo. Esféricos, sabéis que os quiero a todos.
ResponderEliminarBesos siempre, querido.
Muy buena entrevista , un (auto)retrato fiel de Amando y de la Esfera. Ardo por discubrir las siguientes.
ResponderEliminarAunque a estas alturas los que bien te conocemos lo sabemos "casi" todo de ti, siempre se agradece recordarlo e incluso descubrir algún detalle nuevo de tu quehacer, de tu personalidad.
ResponderEliminarAbrazos para entervistador y entrevistado.
Amando siempre a la altura.
ResponderEliminarBuen inicio para esta serie de entrevistas, que nos permitirá descubrir a esos seres y escritores que se ocultan tras La Esfera, un colectivo peligroso y criminal del que poco se sabe. Trabajan en el anonimato.
Amando, es un escritor de los de verdad. De esos que son fieles a las letras y a sus amigos.
Encantadora entrevista, de verdad. No sólo reflejas una parte de tí que desconocía, sino que además concluyes magistralmente con ese poder "otorgado a la palabra" llena de sentido. No, no, ...no palabras vacías de contenido que se edifican en las altas esferas para el disfrute o el encadilamiento de un público abotargado.
ResponderEliminarPalabras llenas de vida, como las tuyas, y como las de la Esfera Cultural; un lugar, en el que creo que todo el mundo puede tener un pequeño rinconcito en el que edificar junto a otros, un espacio cultural muy vivo.
Gracias Amando por estas respuestas que hoy se publican, y sigue así : escribiendo con pasión, con aquella que nunca debieramos perder.
Un abrazo desde mis palabras.
Creo que los que conocemos a Amando no nos sorprendemos. Él es así, en papel y en vivo y en directo. Culto, honesto y generoso.
ResponderEliminarAntonio, no podías haber empezado la ronda de entrevistas con nadie mejor. Él nos ha marcado el nivel...
Saludos,
Anabel
Enhorabuena Amando. Una magnífica entrevista donde aparece además de tu talento tu inmensa grandeza humana. Somos afortunados los que contamos con tu amistad. Besos y mi deseo de volver a verte pronto.
ResponderEliminarSimplemente: ¡¡¡Chapeau!!!
ResponderEliminarMe quedo sin palabras ante este derroche de coherencia, alma y cerebro que te caracteriza, Amando.
ResponderEliminarEs una delicia volver a escuchar (puedo oír tu voz, te lo aseguro) tus palabras, llenas de sensatez y sensibilidad.
Gracias, Antonio, por haberlo hecho posible, por esta magnífica entrevista.
Un abrazo grande a los dos
Amando fue mi primer contactos con la Esfera; la afabilidad, amabilidad y cercanía fueron sus credenciales; esas que hacen de la Esfera un lugar tan especial.
ResponderEliminarAl conocerle un poco más, en esta entrevista, confirmo la opinión que tenía sobre él. Su mirada sobre el mundo es la de un hombre que rezuma calidad humana.Como escritor solo puedo decir que admiro su trabajo, la belleza cuidada de su prosa.
Un abrazo Amando.
Os quiero agradecer vuestras palabras, aunque sean palabras exageradas, sin duda motivadas por el cariño que me tenéis, lo que, para qué engañarnos, es lo más importante.
ResponderEliminarY sólo añadir que por suerte esta entrevista salió a la luz el día del cumpleaños de mi padre, lo que (dadas las circunstancias) es una enorme dicha.
Gracias Antonio por entrevistar a Amando y disfrutar de su persona. Porque, claro, si bien mantengo contanto con él por los correos y leo sus extraordinarios escritos y sus maravillosos poemas, no siempre le guardo tiempo para hacerle la crítica literarria o comentario que, por mi parte, se merece, pues él si que lo hace. Siempre esta ahí al pie del cañon. Y por supuesto que también con él y con todos los plumíferos, iría al fin del mundo.
ResponderEliminarAbrazos fuertes