Sólo soy una mujerque se arruga.
Mi voz y mi cuerpo
han cambiado
y ahora me descubro
vaciándome de recuerdos,
saltando al vacío de los versos,
helada y quieta
sin atreverme
a escribir
un final.
Poema e ilustración: Saray Pavón
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En cierta medida todos somos un perfecto otoño, me gustaron tus versos y espero un lejano final.
ResponderEliminarEse "helada y quieta" ¡qué acertado! La parálisis que nos impide avanzar hacia algún lugar, aquel hacia donde queremos poner el punto y final a nuestra existencia. Esa parálisis a la cual llegamos cuando empezamos a darnos cuenta de que ya pesan más los recuerdos que las ganas de seguir amasando experiencias. Me ha encantado cómo lo has escrito, y la ilustración está muy bien, por cierto. Enhorabuena Saray.
ResponderEliminarEs como un lienzo bello
ResponderEliminarMe gustó
Un abrazo
Y también me gustó tu ilustración, que encierra en contenido de tu poema.
ResponderEliminarAbrazos
Preciosa tu ilustración y el poema que la acompaña Saray, los dos son uno, porque al leer o mirar transmites la misma sensación de soledad y frío ante el futuro incierto.
ResponderEliminarUn saludo desde mi mar,
El final mejor que se escriba solo... y tarde.
ResponderEliminarUna ilustracción que ya expresa mucho, el tiempo avanza para todos y solo nos queda aceptarlo... muy profundo, saludos.
ResponderEliminarImpactante texto con una no menos impactante ilustración.
ResponderEliminarMagnífica toma de conciencia de lo que eres/somos.
Y, tarde o temprano, escribiremos ese final o lo escribirán por nosotros. Es cuestión de elegir.
Estupendos versos para una crisis vital, estupendo que tus letras no se paralicen en otoño.
ResponderEliminarRamón Me alegra saber que te gustó tanto como esperar que el final quede bastante lejos ;) Merci!
ResponderEliminarMiguel Ángel Muchísimas gracias por aumentar mi sonrisa.
Aniagua y
Yashira Encantada de saber que os gustó el "combo" :)
Amando Sí, ¡que aún quedan muchos cafés que saborear!
Nuria Aceptarlo y no dejar que éso nos borre la sonrisa, pese a que haya días grises.
Ana J. Lo mejor es pensar en el durante más que en el final. Me alegra que no te haya dejado indiferente mi aportación :)
Ángeles Démosle la tregua justa a los bolígrafos ;)