09 abril, 2013

Liu Wei, el pianista sin manos que toca con los pies

Cada martes en "Buceando en la música" les traigo a esta sección a músicos que destacan y diferencian por su arte. Hoy les propongo a un músico que destaca por un extrema superación. En La Esfera llevamos ya varias semanas en una sintonía de insuflar ánimos a todos aquellos que sienten deseos de crear en cualquier manifestación artística para que no se pongan excusas.

Liu Wei es chino, tiene ahora 24 años, y perdió sus dos brazos cuando tenía diez años tras un accidente de alta tensión eléctrica que lo dejó en el hospital durante 3 meses. El mundo para él no terminó. En 2010 se presentó al programa de talentos “China Got Talent”, en el que interpretó el clásico “Marriage D’amour” de Richard Clayderman, logró conmover a todo el público y su actuación lo hizo conocido alrededor del mundo.

Practicó durante años siete horas diarias, hasta que aprendió a separar los dedos de sus pies para enfrentarse a las teclas del piano.


 
“La gente como yo sólo tiene dos opciones. Una es abandonar sus sueños, lo que nos llevaría a una rápida muerte y la otra es luchar sin brazos para vivir una vida extraordinaria”

¿Crees que Liu Wei merece ser el artista de la semana en La Esfera por su superación? ¿Tú hubieras desistido y dedicado a otro tipo de arte?
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Francisco Concepción
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8 comentarios:

  1. Merece todos los respetos del mundo. Por su valentía, su juventud y su dedicación, creo que es un ejemplo a segur en cualquier aspecto de la vida. Abrazos

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  2. Claro que merece ser el artista de la semana, eso y mucho más. Es un ejemplo de superación, te das cuenta de que no tenemos derecho a quejarnos ni a sentirnos limitados.

    Estupenda elección.

    Un abrazo.

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  3. Ligia gracias por pasarte a saludarnos y comentar.

    Yashira coincido contigo que muchos nos quejamos de vicio.

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  4. Se ponen los pelos de punta.
    Impresionante!
    No hay nada que la voluntad no consiga.

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  5. ¡Quién dijo miedo! Cuando hay voluntad y pasión, ni las 88 teclas de un piano pueden frenar un sueño. Todo un ejemplo que nos teníamos que apuntar muchos.

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  6. ¡Impresionante!
    No puedo decir nada más.

    Un abrazo.

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  7. La verdad es que hay cosas que no se pueden definir con palabras una de ellas sin duda es la capacidad de superación que tienen algunas personas.

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  8. Al verlo he pensado en Paul Wittgenstein y he buceado en mi blog para dar con este microrrelato que os dejo a todos con un abrazo desde Berlín.
    (Mikel Aboitiz)

    Paul

    El pianista manco me perseguía por las noches, implacable. Le soñaba rico y apuesto. Al comenzar el día, bajo la ducha, aparecía entre la espuma del jabón como un vago recuerdo. Interpretaba a Ravel. Al mediodía me venían a la cabeza jirones desgarrados de su música. Sus notas —una nieve liviana mecida por el viento— caían sobre mis comidas dejadas a medias. Al acostarme, un temblor me visitaba, pues temía encontrarle entre las sábanas. Rehuía el sueño refugiándome en la lectura hasta que, casualmente, en las páginas de un libro, hallé su historia. Existió y se llamaba Paul.

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