Él era un tipo raro, llevaba pañuelos en la cabeza, y sombreros en el bolsillo.
A veces caminaba sobre el mar, y otras nadaba en las dunas.
Incluso tocaba guitarra con el puño cerrado.
Era un tipo raro, siempre decía que no era más que una ilusión. Casi me convencí, cuando lo visité en la calle Diego Portales, y me dijeron que nadie con ese nombre jamás había vivido allí.
Texto: Daniela Gallegos Valenzuela
Me gustó mucho.
ResponderEliminarEnhorabuena!!!
Saludos desde el aire
Está bueno, tiene algo de Borgeano.
ResponderEliminarabrazos totales.
Conciso, misterioso y paradójico.
ResponderEliminarMe gusta.
Saludos afectuosos.
¿Y?
ResponderEliminarSupongo que los sueños, sueños son.
Bienvenida a La Esfera, Daniela
¿Dónde está? Quiero conocerlo. Bienvenida, Daniela.
ResponderEliminarMagnífico. Me ha gustado mucho.
ResponderEliminarpues, Gracias, espero seguir publicando y por supuesto leyendo vuestros escritos. saludos
ResponderEliminarSurrealista y mágico.
ResponderEliminarEstará en algún lugar, real o imaginario, pero estará.
Un abrazo Á.