09 diciembre, 2012

Contemplación


Cuando llega esta fecha, el frío de los primeros de noviembre me sumerge en una agradable y expectante melancolía, desde donde soy capaz de contemplar el mundo con una mayor profundidad que en los calurosos días de verano. Mi predisposición para el pensamiento se hace más accesible al abrigo del invierno. Llega la fecha idónea para escribir y contemplar, para experimentar el deshojar azaroso de esa lectura que desnudará el alma...
Un extraño cosquilleo recorre mi cuerpo mientras escribo estas palabras... pero todo cambia, nada se detiene. Ya podemos contemplar la lluvia envuelta en el frío y sentir la intensidad del calor de la reflexión.
Así, me pides que te cuente lo que nadie sabe, lo que hay detrás... pides entrar en un ámbito privado de intimidad al que sólo ella y yo tenemos acceso... me pides casi un desnudo integral sin ocultamiento alguno... y entonces la vergüenza se apodera de mí...
Todos conocen esta relación y su manera de expresión, pero tú pides más... aunque he de reconocer que me entusiasma tu apasionado interés...


Texto: Rubén Muñoz Martínez

14 comentarios:

  1. Como siempre nos deleitas con buena inspiración.
    Felicidades.
    Amalia

    ResponderEliminar
  2. Cierto que el invierno invita a la reflexión más que el desenfrenado verano, quizá por el calor o por la luz. Buenos momentos para escribir.

    ResponderEliminar
  3. Buena reflexión de una estación que inspira melancolía, una de las cualidades del escritor.

    ResponderEliminar
  4. El invierno nos invita quizás a la calma , nos va envolviendo con su melancolia y nos ofrece ese tiempo para la reflexión.
    Bello texto.

    ResponderEliminar
  5. Amalia, muchas gracias por tus amables palabras.

    ResponderEliminar
  6. Ángeles, efectivamente el frío nos empuja al recogimiento... y esto a la reflexión.

    ResponderEliminar
  7. Inma, no podemos prescindir de esa melancolía, por lo menos ese es mi caso... o al menos eso me dice constantemente mi mujer...

    ResponderEliminar
  8. Rosario, gracias por tu lectura y reflexión.

    ResponderEliminar
  9. Me confieso: este texto es una declaración de amor encubierta a mi fiel y apasionada amante: la Filosofía.

    ResponderEliminar
  10. Una buena amante, la Filosofía.

    ResponderEliminar
  11. Una buena amante, la Filosofía.

    ResponderEliminar

Gracias por contribuir con tus comentarios y tu punto de vista.

Los componentes de La Esfera te saludan y esperan verte a menudo por aquí.

Ésta es tu casa.