08 septiembre, 2013

¿Cómo desmotivar a los piratas?

—Hola. Me enteré que tu hija grabó una película.
—Sí. Aún está en cartelera.
—Voy a ver si esta semana me la bajo.

Les juro que el anterior diálogo no es un chiste surrealista. Formé parte del mismo en dos ocasiones diferentes y con casi las mismas palabras.


piratería, pirata, bajar películas, bajar libros, robar, ladrones
La piratería se ha instalado como algo natural
Hace unos meses mi hija estrenaba a nivel nacional, como coprotagonista, una película. Atrás quedó su trabajo, su sacrificio, sus privaciones. Y por parte de los productores su dinero, ilusiones y tres años de su vida. Durante ese tiempo me encontré con algunos conocidos y como dije mantuve dos veces, con diferentes personas, el mismo diálogo casi calcado. La única diferencia fue que al marido de una de las mujeres le dio un poco de vergüenza escuchar a su mujer decir, delante de mi, que se bajaría la película y le lanzó una patadita con disimulo para que se cortara un poco. Era algo más inteligente que ella.

La conclusión que saqué es que la piratería es algo instalado como natural y casi legitimado por todos.

En ambas conversaciones estuve a nada de decirle: “En cuanto tenga un rato voy a ir a tu piso y me voy a bajar tus muebles” o “Voy al muelle donde tienes el barco atracado y me lo voy a llevar” pues para colmo, las señoras,
no pueden poner como atenuante o excusa que no tengan dinero para ir al cine. Es preferible que no vean la película a que roben el pan de los artistas y de los creadores.

Este espolio sistemático hace que las creaciones (cine, música, literatura...) peligren y los artistas lo estén pasando realmente mal. Y que además tengan que invertir más tiempo, recursos y pensamiento en combatirlo. Ya no tienen suficiente con trabajar, crear e invertir, sino en buscar fórmulas y sistemas para paliar la sangría a la que se ven sometidos.

Con la producción de dicha película (no desvelo el título para no dar pistas) he aprendido bastante. Me sorprendió que antes de estrenar la película ya estuviera circulando por internet. Y pensé: ¡La ruina! ¡Catástrofe! Pero afortunadamente eran varios archivos señuelos que había subido la productora para desmotivar a los piratas. Y es que esta gente se mueve por la simple razón de ser los primeros. Cuando una película u otro producto pirateable está en la red ya no les motiva. Por ello la productora subió varios archivos de la película con el mismo título, donde solo se podían ver los primeros diez minutos del film. El resto era un bucle hasta completar la hora y media que suelen durar las producciones cinematográficas.

Que se consigue con ello:

1.- Desmotivar a los piratas. No serían los "héroes" que subieran la película los primeros.

2.- Desmotivar a los piratas consumidores. Al subir cientos de archivos a la red, se complica determinar cual de ellos contiene la película completa. Les supone bastante trabajo.

3.- Promocionar la película con el visionado de los primeros minutos.

Existen más técnicas y prácticas, pero no es cuestión de desvelar más. Y me arriesgo a escribir esto y a darle más pistas a los piratas, pues esta gente no lee. A ellos solo les mueve robar por robar. Bajan los libros y luego ni los leen.


  • Creo que con la piratería literaria debemos de poner el mismo veneno a los piratas. Me refiero a subir archivos de libros pirateados que contengan erratas, faltas de ortografía, finales desconcertantes, que matemos al bueno, suprimir capítulos o que le cambiemos el nombre a los personajes. 

De esta forma se arriesgarán a leer sucedáneos y perder el tiempo. Eso sí, si los leen, claro.

¿Es normal que alguien te diga en tu cara que te va a robar? ¿Qué opinas? ¿Piensas que son ladrones o tontos?

Hasta el próximo Editorial del domingo . Si te ha gustado el artículo compártelo en tus círculos.
Artículo: Francisco Concepción 

7 comentarios:

  1. Estoy contigo, Francisco. Todavía es la hora que me haya bajado un libro ni una película sin pagar. Me duele incluso, que algún autor me regale su libro. Todo tiene un trabajo detrás, que hay que remunerar. Esta es una discusión habitual entre los amigos; lo tengo muy claro, NO a la piratería.
    Dicho esto, reconozco que si alguien me pasa un pdf lo leo, por supuesto.
    Y tu entrada me recuerda que todavía no he visto la película de tu hija. A ver si busco un rato y la compro en Filmin, pues ya no está en la cartelera.
    Un beso, amigo, con valor añadido incluido1

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  2. Soy del equipo de Isolda.
    Me gusta la idea de cambiar el contrenido de los libros. Claro que tendría que ser un copia y pega de algo inofensivo, que si no estaríamos creando algo nuevo para goce y disfrute de los piratas.

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  3. El problema está en esa idea absurda que se ha implantado casi como un dogma de fe de que todo en internet tiene que ser gratis. A la mayoría de la gente no se le ocurre robar películas, libros, etc en tiendas, pero lo ven normal hacerlo en internet, es más, muchos consideran que ni siquiera están robando. Hay que hacer entender a la gente que eso también es robar.
    Saludos

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  4. Lo que está Ud. contando es tan real como que a mí también me ha pasado aunque a otro nivel.
    Soy una autora novel y en marzo conseguí con todo el esfuerzo del mundo que me publicaran mi primera novela.
    Como todos los autores que empiezan, mi círculo de lectores es muy pequeño. Pues en ese pequeño círculo, una conocida me dijo: ¿Te han publicado una novela? Ay, pues le voy a decir a Fulanito (su marido)que me la baje.
    Ahora que lo llevaba claro, la pobre. No quise desilusionarla, pero hasta para que te pirateen hay que ser alguien en este mundillo...je,je.
    Saludos

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  5. Según me confirman fuentes bien informadas, el ministro de la cosa ha decidido que a partir de mañana los artistas pirateados tienen autorización a piratear filetes de ternera, pescadilla o merluza, langostinos, pepinos, pimientos, patatas, por supuesto el pan, así como camisas, blusas, faldas, pantalones, ropa interior, trajes noche, chaqués, productos de limpieza, perfumería, casas, coches, motos o billetes de avión...

    Ahora en serio, no sé en el resto del mundo, pero el concepto que se tiene en España de que la tarea del creador (sobre todo cine, canciones y novelas -a distintos niveles, por supuesto-) es un bien público, como el uso de los parques o las calles. Que yo sepa, y hasta donde sé, los albañiles pasan su factura por una obra, y bien merecido que tienen su pago, sólo faltaba. Por qué la tarea creativa no tiene la misma consideración...

    ¡Cuánto mal ha hecho la palabra inspiración! La gente piensa que como se trata de seres inspirados, las canciones, las películas, las novelas salen solas.

    A mí me sucede lo contrario, me descargo libros que pago y luego soy incapaz de subirlos a mi equipo porque algún sistema de seguridad anticopias impide que lleguen a mi ordenador. Soy un caso.

    Ahora, por meter un dedo en el ojo, pregunto, ¿cuántos libros más, cuántas entradas de cine más, cuantos CD más, etcétera se venderían en el utópico caso de que no hubiera piratas que se los descargaran por la cara?
    Como bien dices estos piratas sólo lo hacen por ser los primeros...
    ¿No interesaría un sistema de venta o de difusión más barato? Ya sé que el caso del que partes no tiene como problema el dinero, pero no es precisamente el supuesto de quienes más piratean -sobre todo cine y música. El perfil del lector pirata quizá sea distinto-.

    También metiendo el dedo en la llaga: creo que lo más se piratea -salvo el caso de los amigos que te lo dicen sin pensar, me refiero a Mamen, por ejemplo- es el de los famosísimos que ya son superventas o lo van a ser. Y esto me lleva a otra reflexión. Cuando hablamos de una copia pirata de un producto que aún no se ha estrenado o publicado, ¿cómo es posible que ya esté en Internet? ¿No habrá que garantizar más y mejor los circuitos internos de seguridad de productoras y editoriales?

    Y por último (esto es como hacerme el harakiri), ¿la existencia de tantos archivos circulando libremente por la red y de libre acceso -por ejemplo los blogs que publican novelas enteras -ejem-, no está acostumbrando al todo gratis en Internet?

    Son preguntas, ni afirmo ni niego. Creo que si el tema estuviera muy claro no habría tantas opiniones al respecto.

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  6. Gracias a cuantos comentan y edifican con su opinión el debate. Un debate en el que la mayoría coincide en el daño que le hacemos todos con la piratería a la creación.

    Mi madre me decía que "todo al final se paga". Si lo tomamos en el sentido literal me parece muy improbable. Pero sí que lo pagaremos de alguna manera: ¿menos gente dedicada a la creación? ¿creaciones de menos calidad?, pues no existirán creadores dedicados a crear en cuerpo y alma?

    Lo pagaremos seguro.

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  7. Bueno, a decir verdad no estoy de acuerdo con el sentido del post, tu enfoque es bastante simplista. Lo que lamento es que el concepto de "pirata=robo" que machaconamente repite la industria e interesados, todavía cala, aunque afortunadamente cada vez menos.

    Te equivocas al pensar que los "piratas" no leen. Y las trampas que propones, pienso que no darán resultado. Me atrevo a sugerirte que leas algo acerca de "Cultura Libre y Educación Hacker". Y no te preocupes que no desaparecerá ni la cultura ni los creadores, al revés, cada vez habrá más, mejores y alcanzarán el éxito de una forma más justa.

    Para no entrar en discusiones, me limito a dejar este post que espero os deje clara la primera premisa.

    SOBRE LA PROPIEDAD INTELECTUAL

    Nuestra Constitución en el artículo 33.2, te recuerda lo que la prensa te pide que olvides:
    «Es la función social la que, junto con el provecho particular del propietario, constituye el contenido esencial del derecho de propiedad».

    Javier Barnés, Catedrático de Derecho Administrativo:
    «En definitiva, por virtud de la función social, la utilización del bien, su explotación económica, no constituye el objetivo final de la propiedad privada. El rendimiento económico que pueda derivarse del bien ha de contribuir —con una cuota de participación que determinará el legislador— al beneficio social, verdadero fin de la institución».

    En el libro "Internet y Derecho Penal" dice que: «Es indudable que el usuario de Internet puede realizar copias de todas aquellas obras artísticas que la red le ofrezca, además, por supuesto, de disfrutar de su audición o de su lectura. Nada de particular sucede que no suceda también con otros casos de copias, fotocopias o grabaciones para uso particular, sin ánimo de lucro y sin propósito de ulterior difusión, (Art. 31.2 Ley de Propiedad Intelectual - http://bit.ly/1atkxit)».

    En "Comentarios a la Ley de Propiedad Intelectual" se dice que: «la copia para uso privado no presupone en el copista la propiedad del ejemplar copiado», y en el "Manual de Propiedad Intelectual" coordinado por Rodrigo Bercovitz, se recuerda que en virtud de la copia privada: «son lícitas las grabaciones en vídeo de programas de televisión, o de música que se emite por la radio, o de una cinta de música que nos prestó un amigo, o la fotocopia de un libro que realice un particular».

    En realidad, los argumentos jurídicos contra la copia para uso privado no son más que una excusa que esconde un pensamiento más simple y que se reduce a la idea de que todo acceso a un bien cultural sin que exista pago previo, es ilegal.

    Junto a esto, están todas las sentencias que ha habido, dando la razón a las Webs de enlaces, que ha sido todas.

    No obstante, lo políticos, los perros obedientes, trabajan duro, (ironía), para cambiar las leyes y privarnos del derecho a la copia privada... quizá lo consigan.

    Salu2

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