07 agosto, 2011

El Trueno


El Trueno era campesino pero sentía el mar como un pirata. Tenía la cara redonda, el pelo hirsuto, la barba cerrada; y en las manos llevaba tatuadas letras antiguas que le protegían de todo. Trabajaba con el hacha igual que yo con la pluma, araba con un solo buey y cuando le tocaba cargar animales muertos, siempre lo hacía burlándose de sus hermanos. Verle comer era asombroso.
Una vez, El Trueno y sus amigos nos sacaron de la zanja donde dormíamos y nos llevaron a lo alto de un monte. La luna asomaba a la izquierda, entre nubes de gasa. Delante respiraba el mar como un animal que se despierta. Y a nuestra derecha, se tendía la costa de hierro. El alba nos sorprendió envueltos en reproches. Un rayo saltó el horizonte y disipó las nubes. Sobre la línea surgieron playas negras y rocas altas. También algunas casas que parían botes como orugas.
Nadie echó de menos al Trueno hasta que
 alguien le preguntó algo. Nos separamos con miedo pero pronto lo vimos en la playa. Estaba desnudo. Corrió por las olas y se arrojó entre ellas. Sus hombros asomaban del agua como cascos de bronce y su espalda parecía un escudo. Sus pies dejaban una estela de fragante espuma. Imposible avanzar más rápido.
Cuando sacó la cabeza del agua, dejó de nadar. Pero todavía la corriente lo alejó un poco. Trató de volver. No pudo. Cabotó hacia el este, hacia el oeste, se internó en el mar; y entonces, una corriente benigna lo trajo de vuelta a la playa. Estaba gris, como el tronco de un chopo. Sonrió y le di mi manta. Él la dobló a lo largo, se la echó al hombro y fue a vestirse. Iba a paso lento dejando en la arena huellas profundas: no había separación entre los dedos.
©Pablo Gonz
Narración: La Voz silenciosa

15 comentarios:

  1. Estimados amigos:
    Muchas gracias por la invitación a participar en vuestro blog. Este el mi primer cuento aquí y me siento muy feliz de verlo publicado.
    Un cordial saludo,
    PABLO GONZ

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  2. Gran tipo el Trueno. Con un amigo así iría hasta el fin del mundo.

    Es una suerte compartir este espacio.

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  3. Bienvenido Pablo. Esperamos que ruedes en La Esfera durante tiempo.

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  4. Muchas gracias, Amando y FranCo. Seguiré subiendo algunos cuentos breves que tengo por ahí.
    Un cordial saludo,
    PABLO GONZ

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  5. Muy buen texto Pablo. Enhorabuena y bienvenido a La Esfera.

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  6. Bueno, bueno... ¡qué estupenda acogida me habeis dado! Os la agradezco muchísimo. Esto de ser leído ya es de por sí una gozada pero que además guste (y te lo digan) es todo un lujazo. ¡Lo celebro!
    Un fuerte abrazo a todos,
    PABLO GONZ

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  7. Bienvenido, Pablo!!
    Ha sido un auténtico pacer leer un cuento tan bien estructurado y escrito.
    Ese mar que respiraba como un animal que se despierta, todo un hallazgo.
    Ojalá ruedes mucho con nosotros

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  8. Pablo, el género del cuento es un arte que particularmente me entusiasma. Esperamos tus nuevas aportaciones.

    Bienvenido a La Esfera.

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  9. Bienvenido.

    Esperamos más colaboraciones tuyas.

    Saludos,

    Anabel, la Cuentista

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  10. Gracias, Ana y Anabel, por vuestros piropos y vuestros buenos deseos para el futuro. Sin duda, subiré más cuentitos a la página. O, como vosotros decís, rodaré en la esfera.
    Un besazo,
    PABLO GONZ

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  11. catherine8/8/11, 3:27

    El Trueno, el titán con los pies palmeados... es un cuento excelente, Pablo. Gracias a la Voz por traerlo aquí de nuevo.

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  12. No podía ser menos que muy bueno un cuento de Pablo Gonz.

    Un placer leerlo aquí

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  13. Siendo de Pablo y además en esa bonita voz, resulta fabloso. ¡Me ha encantado!
    Besicos muchos.

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  14. Conmovedor texto, Pablo. Siempre es un lujo leerte-oirte. Lo único que no me convence es la melodia de fondo. La voz, genial.

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  15. Este texto me encantó en su día. Leído por la Voz, mucho más.
    Fantástico!

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