Crítica Blog: Rosas entre la Mierda

Lo prometido es deuda. Prometimos bucear por Internet y traerles la crítica de blogs culturales. Aquí estamos. Y me pregunto por donde empezar. Empecemos por el título: ROSAS ENTRE LA MIERDA, ya de por sí el título merece todo un comentario, casi es lo que pretende esta nueva sección, encontrar joyas en los vertederos de Internet y les aseguro que existen muchas.

Rosas entre la Mierda nos presenta una estética simplista, limpia, minimalista, sin colorido, donde nos sorprenden sus fotos en blanco y negro (solo por ello vale la pena visitar el blog), que parecen rescatadas del siglo pasado. Fotografías que nos posicionan en EEUU y que son excusas para la creación de textos, novelando esa imagen. Textos sólidos, que arrastran mucho sentido e ilógica en algún caso. El blog tiene aspecto de simple, pero es solo una primera impresión, es denso. Cuando el visitante llega, le cuesta entender lo que allí se intenta comunicar. Puedes bucear en sus secciones, y encontrar textos literarios, piezas musicales, crítica de libros y todo aderezado con una salsa homogénea que hace que el blog tenga una identidad propia y difícilmente clasificable.

Cuenta con diferentes secciones, pero destacaría la que ellos llaman Breviario. La prosa que emplea en los textos, no se priva de utilizar leguaje cortante cuando es necesario. Como ejemplo el texto Las Horas de humo y un lenguaje elaborado y de artificio en otras entradas.

Un blog que nació allá por el 3 de junio de 2007, y que mantiene una gran constancia en el tiempo, se actualiza cada 2/3 días. Actualizaciones trabajadas, que no son refritos o vínculos a otras webs. Indudablemente es un blog para minorías, lo demuestra los pocos comentarios existentes en sus post.

Como resumen diría que se trata de un blog que no se apunta a caballo ganador, que no busca visitas o controversias gratuitas. El principal adjetivo que le endosaría sería “homogéneo”. Dejo a los que lean esta crítica hablar de la voz que emplea. Creo que es alta literatura reflexiva. ¿Puede ser?