- Papito no te preocupes, descuida mi amor, mañana te hago el giro. Que sí… que el pana este ya lo tengo camelado y nos caseremos pronto. ¡Te quiero mi vida! ¿Seguro que piensas en mí cada día? Que no me olvido, mañana a primera hora estoy en Western Union, justico lo tengo acá cerquita de casa. ¡Claro que no se la chupo... es un viejo chocho! ¡Que no te miento, mi amor! Bueno… solo alguna vez, ya sabes… cuando se pone pesado, pero nunca como a ti, con tanta salibita y tan jugosita. Necesitamos la plata mi amor… pronto agrarraré los papeles. Que sí… que mañanica estoy en Western y tienes la plata. ¡Cuánto te quiero!Texto: Francisco Concepción
Vender el alma al diablo. ¡Qué tiempos aquellos en que se hacía el pacto entre humos y sangre!
ResponderEliminar¡Qué poco glamour, chuparla por pasta y papeles!
A veces, cualquier tiempo pasado fue mejor...
Un texto corto y contudente sobre la realidad que se repite en muchas mujeres latinas, el cuerpo y la picardía como herramientas de trabajo. El mejor parado, el desplumado viejo chocho
ResponderEliminarEl desplumado viejo chocho ya sabe lo que hay y a lo que se enfrenta...
ResponderEliminarDos no "se chupan" si uno no quiere.
La vida misma.
Saludos,
Anabel, la Cuentista
Anabel, la soledad es hipnótica, y cuando alguien se disfraza y te da compañía, te subes en una nube desde la que no ves la realidad.
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