05 febrero, 2010

Woody Allen: el sentido del azar

A estas alturas de la película, creo que nadie puede negar que Woody Allen es una figura sin igual, que ya ha creado un legado único que quedará para la historia de la humanidad.
W.A. no es reconocido solamente por haber realizado una serie de películas magníficas (Manhattan, Hannah y sus hermanas o Match Point, por citar algunas), sino que su maestría reside en el hecho de haber desarrollado un estilo particular, que ha sabido ir puliendo con el paso de los años. Desde películas como Toma el dinero y corre o El dormilón hasta Vicky, Cristina, Barcelona, Allen ha ido “re-haciéndose” a sí mismo constantemente.
Sus influencias del cine europeo son claras (Bergman, especialmente), él mismo las reconoce abiertamente y declara orgulloso que agradece que se le reconozca en Europa, como el director de cine norteamericano más europeo de todos.
En su manera de hacer cine, el autor neoyorkino nos muestra de una manera gravemente-cómica,
todas nuestras grandes preocupaciones: el amor, el sexo, las relaciones sociales o la muerte, son algunos de los temas habituales sobre los que Allen edifica sus historias.
Pero de una u otra manera, a través de ese cúmulo común de componentes que suelen compartir la mayoría de sus películas, el director de origen judío siempre desliza suavemente como quien no quiere la cosa, toda una filosofía de vida desde la que se articulan sus películas. Su visión es la de un ciudadano occidental de clase media-alta, angustiado por la vaciedad y la levedad de la existencia. Casi la práctica totalidad de sus historias, plantean la cuestión de la aparente levedad de la existencia.
¿Cómo debemos tomarnos la vida, si ni tan siquiera sabemos cuál es su sentido? Desde esta situación de duda y angustia permanente, y acudiendo constantemente al humor intelectual con finas referencias culturales, Allen nos sitúa ante historias en donde sus personajes no saben cómo dirigir sus vidas ante semejantes preguntas.
Sin embargo, si atendemos detenidamente al telón reflexivo que subyace en su cine, advertimos discretamente en muchos detalles cuál parece ser la actitud de Woody ante la vida. El cineasta norteamericano parece asumir, no sin dudas, que la existencia del ser humano cuelga de un hilo extremadamente fino, el cual puede romperse en cualquier momento sin justificación alguna. La vida, pues, es pura contingencia, puro sin porqué. Pero a pesar de esto, Allen no deja de reflexionar sobre el sentido del azar en la vida humana. Y ya en algún lugar, nos advierte...
“Aquél que dijo: “Más vale tener suerte que talento.”, conocía la esencia de la vida.”

14 comentarios:

  1. Hace una semana justo, a estas horas, andaba viendo con mi pareja "Anny Hall" que no había visto (vale, vale, ya sé que es imperdonable, que no se puede decir que a uno le guste el cine si no la ha visto, etc, etc, etc...).
    La verdad es que me encantó, me lo pasé de cine (obviamente) y creo que el WA que describes en tu texto, ya estaba en embrión en esta peli.
    Match point me pareció soberbia, y haberme hecho una foto junto a él (o sea su estatua en Oviedo) es un honor.

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  2. Armando, suscribo tu sentimiento hacia el cine de Woody Allen y efectivamente las dos pelis que citas son dos obras maravillosas. Yo también lo paso genial en casa, viendo una y otra vez sus pelis junto a mi mujer.

    Saludos.

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  3. ¡Enorme Woody Allen! Guardo gran regusto de "Desmontando a Harry" y la última de "Si la cosa funciona" también me hizo reir bastante, ese científico neurítico obsesivo, y a la vez, con la mayor de las suertes,jajja.

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  4. Jo, pues menudo personaje nos traes a la palestra. Sin duda es un genio. Como bien dices, su maestria está en haber desarrollado un estilo peculiar que lo hace inconfundible del resto de directores. La primera película que ví de él fue "El Dormilón" y me pareció tan disparatada que pronto me "enganché" a él. Posteriormente con la edad seguí viendo películas más maduras, que nunca me dejaron indiferente. Todo un personaje...

    Un abrazo.

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  5. Me encanta Woody Allen. No he visto todas sus películas, desgraciadamente, pero ya se andará. Me encanta "Septiembre" y cualquier otra en la que las vidas de los personajes entretejen un hilo de araña pegajoso, a veces asfixiante, otras revelador... Ambientes y situaciones en los que las preguntas de la existencia revolotean por las mentes de los protagonistas y por las de los espectadores. La levedad de la existencia y, sobre todo, la levedad y entresijos de las relaciones humanas. Todo ello bordado con su sentido del humor, su ironía.

    Fantástico Woody.

    Es curioso que en EEUU no tenga demasiado éxito, sin embargo, los actores se "matan" por lograr un papel en una de sus películas.

    A seguir disfrutándolo.

    Saludos,

    Anabel, la Cuentista

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  6. AlainPoet, Woody Allen es un genio sin igual, me alegra compartir el entusiasmo por su cine.

    Saludos.

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  7. Felix, efectivamente el estilo de Allen es peculiar y además ha madurado como el bueno vino.

    Un saludo.

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  8. Anabel, comparto todos tus comentarios y yo también espero poder terminar algún de ver día todas las películas de Woody.

    Saludos.

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  9. Buen artículo para redescubrir a W.A. al que no considero norteamericano, solo neoyorkino, como si fuera un poco de todos, un personaje que utiliza un lenguaje universal, con esa angustia cotidiana, donde abunda las obsesiones, una filosofía de vida que se manifiesta en esa ironía y su sentido del humor, y efectivamente en aprovechar todas las oportunidades que se te presentan.

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  10. Hoy domingo 7 de febrero regalan con el periódico ABC una de sus películas, Scoop. Un film donde los incondicionales de Allen no se muestran unánimes en referencia a su calidad.
    Volveré a verla.

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  11. Me he cansado de Woody Allen.
    Creo que es uno de los mejores cineastas del pasado siglo. Sin embargo, ya no me dice nada. Scoop me aburrió mortalmente y no me atrevo a gastar dos horas de mi vida en sus nuevas pelis.
    Supongo que me pasa como con Almodovar, que me fascinaba con sus primeras películas, llenas de fallos de guión y salidas de tono y que, en cuanto se hizo un director mundialmente aclamado perdió su frescura sin perder sus tics...
    Por supuesto, es sólo mi opinión como espectadora.

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  12. Marcos, hoy he vuelto a ver "Misterioso asesinato en Manhattan". Ratifico tus palabras uan a una.

    Saludos.

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  13. Franco, no me he comprado el periódico porque ya la tengo y me parece una película agradable, sin llegar al nivel de las mejores, pero que merece la pena ver. Sus películas siempre hay que verlas más de una vez.

    Saludos.

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  14. Ana, eso se puede deber a que Woody Allen ha creado un estilo muy determinado y es comprensible, que al menos que te encante, pueda llegar a cansarte. Sus películas repiten muchas estructuras y en ocasiones cada nueva peli se dedica a aportar pequeños nuevos matices sobre lo ya creado. Apesar de ello, los forofos de su cine esperamos ansiosos cada año su nueva peli. "Si la cosa funciona" dicen que es una obra maestra, yo todavía no la he visto, pero la veré.

    Saludos.

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