17 agosto, 2011

La hortera y el escritor


La mujer del montón se vistió. El hombre del montón escribió. Se maquilló con los mejores productos que estaban a su alcance, su posición no le permitía llegar a la alta cosmética. Escribió con los mejores recursos que asimiló de sus lecturas. Se enfundó la más corta de las minifaldas. Escribió versos provocadores. Se puso medias de rejilla nada acordes con unos zapatos azul añil de tacón de plataforma. Escribió sobre la inmundicia, el dolor y las miserias humanas... Se pintó los labios y maquilló de forma convulsiva. Se vió seductora. Escribió empleando palabras mal sonantes y barriobajeras. Salió a la calle contorneándose, mirando altivamente. Editó su primer libro, por vez primera existió. Paseando la miraban y ella se hinchaba más de lo que estaba. Presentaron su libro y lo halagaron, era lo políticamente correcto. El escritor se creció. Ella se consintió, disfrutaba de las miradas que recibía, convirtiéndose en una diva, ya no era una tía gorda llena de bañas y sin clase. El hombre se convirtió en escritor, en un creador, era diferente, todos comentaban su escritura. Se endiosó. A la mujer le provocaron ser más extravagante, a enseñar más su cuerpo de carnicería y matadero, su tetas vacunas… estaba irresistible, todos la miraban. Todos la piropeaban asquerosamente por la calle. Era objeto de deseo, ella lo sabía. El hombre que escribía empleaba cada vez más un lenguaje detestable, común y poco entendible, en un intento por sacar la cabeza en la literatura, de ser “El Escritor”, todos comentaban sus escritos. ¡Qué clase tenía la gorda del barrio! con medias de rejilla bajo treinta y nueve grados y maquillaje nocturno corrido a las doce del mediodía y que bien escribía el hombre “Escritor”, solo comparable a los grandes: a Poe, Bukowski, Kafka…

Un día una mujer de noventa años que arrastraba sus huesos, arrugas y su peta, salió desnuda a la calle y todos también la miraban, otro día un escritor se entintó el pene, y en erección escribió una palabra sobre un folio, en el barrio lo propusieron para el Nobel. 

Texto: Francisco Concepción 
Narración: La Voz Silenciosa

16 comentarios:

  1. Efectivamente, el mundo parece de los provocadores y de los zafios. Buen texto para la reflexión.

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  2. Uau. Un texto-navaja. Muy duro, pero al mismo tiempo de esos que te dejan pensando.
    Saludos.

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  3. La causa... que distinta al efecto!

    Para releer!


    Saludiños.

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  4. Inteligente texto al comparar la vanidad del escritor con la de la mujer del barrio y su vana fantasía. Terrible tentación la del endiosado cuando su vanidad supera su inteligencia, cayendo en la imagen hortera de aquel que quiere sobrevivir intentando sobresalir por encima de los demás. Sólo la ignorancia y la vanidad serán su salvación para no caer en el vértigo del abismo, creando un mundo fantástico y exclusivo, a su medida.

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  5. Cada vez que escribes te sales, FranCo ¿tu te percatas de la fuerza que transmites en cada reflexión que te planteas, no dejas a nadie indiferente.
    Textos que relees porque siempre hay algo más que descubrir en su lectura.
    Me quito el sombrero.

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  6. Guau...

    Ay, ay, ay.

    Saludos.

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  7. Impecable, impresionante, impúdico, inmenso.
    Qué buen paralelismo, qué personajes reconocibles y reconocidos.
    Qué oportunidad para mirarnos en el espejo y echar a correr de esa mujer y ese escritor que llevamos, más o menos camuflados, dentro.

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  8. La Vanidad junto a la ignorancia es una bomba de relojería.
    En la vida existen muchos paralelismos y de ellos me he nutrido.
    Gracias por sus comentarios.

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  9. Dácil Martín30/7/10, 0:37

    Paralelismo con acierto impeclable. Me gustado mucho. Felicidades

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  10. ¿Paralelismos? Creo que, en este caso, hay al menos un fiel reflejo, una copia exacta, al menos por un lado, autor (escritor). "En la vida...", dice... jaja.

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  11. catherine17/8/11, 1:19

    Paralelísmo, sí, que la Voz subraya.
    Impresionante y verdadero. Lo que es la fama ahora, vanidad ignorante. Una joya más de tu parte, después de este vídeo colorado, fresco , musical, etcéra.
    Enhorabuena, FranCo.

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  12. No había leído este texto. Me alegro que la Voz lo haya puesto de nuevo a mi alcance. Lleva tu sello exagerado, pero sobre todo tu sarcasmo. Sé que los hay, pero espero no conocer personalmente a ningún escritor así.Conmigo no van, ni ése ni otros Nobeles más recientes...
    Un beso, Francisco.

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  13. Un buen trabajo de paralelismo, oficios comunicantes. Cuando leo este tipo de relato que presenta personajes humo me pregunto si realmente ellos son los protagonistas o lo son el coro de personas que les mantiene.
    Y como siempre, lo importante de la literatura es el que te haga pensar.

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  14. Muy bueno este relato,y verdadero si.Magistralmente interpretado, felicidades amigo, porque con tu Voz lo has realzado. Enhorabuena Fran sigue escribiendo asi, me gusta. Un abrazo.

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  15. Un buen texto, muy trabajado y logrado

    Felicidades

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  16. Sigo diciendo lo que decía cuando llevaba la trenka negra. Y además con la voz de José el paralelismo se hace mayor aún...

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