Me dijo que es un viejo que cumple setenta. La familia en peso se lo está celebrando. Quiere que toque a la puerta, cante el cumpleaños feliz a lo Monroe y, luego en sus rodillas, le dé los globos y un boquinazo restregando mi carmín rojo por sus morros. Todo por ver la cara de ella, la bruja, que bien merecido se lo tiene. No sé... no sé... cómo saldré de esta, aunque dos mil euros valdrán la pena. Sacará fotos y las colgará en internet: Tremendo escándolo, y yo por medio. ¿Y si me lo impiden? Dijo que estará allí, que no me preocupase, abrirá la puerta y me guiará hasta el salón donde estarán tomando champán y con los regalos para el viejo. Se llama Emilio, le flipan flacas y con tacones altos. Quedará hinoptizado conmigo, me dijo, que era una gata de su gusto, que no me rechazará. Pero con la bruja que tuviese cuidado, capaz es de darme un bofetón. Si así ocurriera, añadirá la mejor foto para el escándalo.
Texto: Dácil Martín
Más sobre este texto aquí
Dos mil euros!... ¡Debe ser un pez gordo gordo de verdad!. Un relato de lo más sugerente que hace que me quede con las ganas de segunda parte. ¿Habrá o no habrá foto?, ¿habrá o no habrá boquinazo?, ¿habrá o no habrá bofetón?,...
ResponderEliminarTal vez no habrá nada porque ella decide que su opinión sobre sí misma vale más de 2.000 euros.
ResponderEliminarO se trata de un engaño. Cuidado con el exceso, lo mismo hay gato encerrado.
ResponderEliminarReal como la vida misma. Por ahí se empieza y luego te haces unos cuantos platós, jaja. Con bofetón, el caché aumentaría.
ResponderEliminarMe ha gustado, Dácil.
Un beso enorme.
Parece que en vez de hacer un regalo a "Emilio" -al que le flipan las flacas- se trata de ver la cara de bruja de ella que se lo tiene merecido.
ResponderEliminarY colgar las fotos en facebook para el escándalo, no sé no sé, no te fies Marylin de ese que te abrirá la puerta, tu te llevas 2000 pero ¿Y él?.
Enhorabuena Dácil. Á.
Fiestas de cumpleaños. Todas quieren ser fiestas "sorpresas". Todas con tarta y cancioncita y cuando son la repera contienen una gogó o el boy. ¿No hay nadie original y diferente?
ResponderEliminarSocorro, no me celebren mi cumpleaños. Gracias.
Dácil, interesante monólogo interior que te lleva a la fiesta y hasta lospersonajes que allí se encuentran y sus metas.
FranCo, te recuerdo que hay por lo menos un par de relatos y un haiku que no hablan de cumpleaños. Tal vez por eso, me gustan más. Claro que en esta entrada a lo Monroe, es lo que pide. Vaya la que has montado con la foto de marras! Pero es un buen ejercicio, sí señor.
ResponderEliminarBesos de globos de colores?
Isolda, de ello se trataba, de comprobar las diferentes miradas que tenemos los escritores. Unos somos miopes, otros tienen estrabismo, astigmatismo... Pero todos tenemos alguna "enfremedad" que nos distorciona lo que aparentemente es una escena cotidiana. Aunque a pocas chicas he visto yo en el metro de esta guisa.
ResponderEliminarY otros, como menda, hipermetropía, astigmatismo, vista cansada, etc...
ResponderEliminarLo llevo claro.
Lástima no ser delgada: 2000 € me irían de perlas...
ResponderEliminarAnabel
La verdad, que esta idea de Francisco está divertidísima. Y es cierto, algunos textos no van de cumpleños, hay también relatos originales. Me lo he pasado bien escribiendo y ahora aún más leyendo los comentarios de todos.
ResponderEliminarGracias Miguel Ángel, Montse, FRancisco, Amando, Isolda, Ángeles, Anabel..., y lo que seríamos capaz de hacer por 2000 euros, aunque Montse es todo un coraje, sí señor.
Un abrazo.
Me ha gustado mucho Dácil, otra visión más de un fotografía que parece no tener fin.
ResponderEliminarMe ha sorprendido y divertido a partes iguales.
ResponderEliminarUna visión muy distinta de la misma foto, con un lenguaje fresco.
Me ha encantado, Dácil. Un montón.
Un besazo