21 febrero, 2010

Barajando recuerdos

Barajando recuerdos
me encontré con el tuyo.
No dolía.
Lo saqué de su estuche,
sacudí sus raíces
en el viento,
lo puse a contraluz:
Era un cristal pulido
reflejando peces de colores,
una flor sin espinas
que no ardía.
Lo arrojé contra el muro
y sonó la sirena de mi alarma.
¿Quién apagó su lumbre?
¿Quién le quitó su filo
a mi recuerdo-lanza
que yo amaba?

6 comentarios:

  1. Controversias del ser...

    Tan doloros puede ser recordar, como que se evapore los recuerdos...

    Saludos, siempre esencia.

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  2. No conocía a esta autora. Investigaré un poco.
    Poesía limpia. Sin barroquismo.

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  3. La he disfrutado mucho. Conocía a la autora, pero este poema en concreto no.

    Gracias por el aporte, Fusa.

    Saludos,

    Anabel, la Cuentista

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  4. Me gustó el texto. Advertir que un recuerdo valioso al fin ya no significa nada, puede ser doloroso. Es custión de soltar el lastre.
    Mis saludos a la autora.

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  5. Hermoso y limpio poema.
    Habrá que investigar sobre esta autora.
    Gtacias por traérnosla.

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  6. Hermosa carta de presentación para introducirnos en la obra de autora comprometida.

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