- ¡ Mi capitán, un esquife a la vista !
- ¿Un esquife, que es eso?
- Una lancha insignificante comparada con nuestro buque armado, mi capitán, y se dirige hacia aquí.
- En son de paz, supongo.
- Están armados con rifles. Creo que vienen a por nosotros, mi capitán.
-¿Cómo? A ver esos ojos.
- No estoy fumado, mi capitán. Le aseguro que se acercan a babor; seis hombres negros, seis piratas somalíes que apuntan al buque, mi capitán.
- ¿Somalíes dices? ¿No sonlos negros todos iguales?
- Estamos en las aguas de Yibuti, mi capitán.
- ¿Yibuti?
- Sí, mi capitán, en Somalia. ¡Cuidado, disparan, agáchese!
- Hijos de la gran... ¡Cabo, responde con un misíl!
- No podemos, mi capitán, están muy cerca y dañaríamos al buque. Acuérdese aquella vez...
- ¡Ay! me dan. Mándales con un cañonazo.
- Tres ¡ay!, dos, uno... ¡Fuego!
- ¿Les dimos?
- Sí, sí, veo al esquife hundiéndose tras el humo, mi capitán.
- ¡Uf! menos mal.
- ¡Han saltado, han saltado! Nadan hacia aquí, mi capitan.
- ¡Sinvergüenzas, terroristas... apresaaarlos!
- ¡Los hemos cogido, ya están amordazados! Pero, pero... , les tiembla la barriga como si aguantaran las risas, mi capitán.
- ¡Llevarlos al calabozo, pegarles hasta la tortura! Ahora sabrán quien ríe el último.
- ¡Mi capitán, mi capitán...!
- ¿Quée...?
- Los piratas, han escapado, han abierto un boquete en la cerradura, y, y...
- ¿Y...? porque estás acabando con mi paciencia, cabo.
- ...han dejado guiñoles con agujas clavadas, mi capitán.
-¿Guiñoles?
- Sí, muñecos de trapo vestidos de pescadores. También hay uno vestido de capitán de la marina con agujas clavadas en sus posaderas, con perdón, mi capitán.
- ¡Coño! ese soy yo.
- ¡Preparen los misiles, los cañones automáticos, las ametralladoras; perseguirles; destrozarlo todo: el mar, la costa, todo lo que se mueva...!
- ¿Y los atunes? mi capitán.
- Que se aparten los atunes.
- ¿Y a la Luna? mi capitán.
- A esa aún no, imbécil.
- ¡Fuego!
- ¿Un esquife, que es eso?
- Una lancha insignificante comparada con nuestro buque armado, mi capitán, y se dirige hacia aquí.
- En son de paz, supongo.
- Están armados con rifles. Creo que vienen a por nosotros, mi capitán.
-¿Cómo? A ver esos ojos.
- No estoy fumado, mi capitán. Le aseguro que se acercan a babor; seis hombres negros, seis piratas somalíes que apuntan al buque, mi capitán.
- ¿Somalíes dices? ¿No sonlos negros todos iguales?
- Estamos en las aguas de Yibuti, mi capitán.
- ¿Yibuti?
- Sí, mi capitán, en Somalia. ¡Cuidado, disparan, agáchese!
- Hijos de la gran... ¡Cabo, responde con un misíl!
- No podemos, mi capitán, están muy cerca y dañaríamos al buque. Acuérdese aquella vez...
- ¡Ay! me dan. Mándales con un cañonazo.
- Tres ¡ay!, dos, uno... ¡Fuego!
- ¿Les dimos?
- Sí, sí, veo al esquife hundiéndose tras el humo, mi capitán.
- ¡Uf! menos mal.
- ¡Han saltado, han saltado! Nadan hacia aquí, mi capitan.
- ¡Sinvergüenzas, terroristas... apresaaarlos!
- ¡Los hemos cogido, ya están amordazados! Pero, pero... , les tiembla la barriga como si aguantaran las risas, mi capitán.
- ¡Llevarlos al calabozo, pegarles hasta la tortura! Ahora sabrán quien ríe el último.
- ¡Mi capitán, mi capitán...!
- ¿Quée...?
- Los piratas, han escapado, han abierto un boquete en la cerradura, y, y...
- ¿Y...? porque estás acabando con mi paciencia, cabo.
- ...han dejado guiñoles con agujas clavadas, mi capitán.
-¿Guiñoles?
- Sí, muñecos de trapo vestidos de pescadores. También hay uno vestido de capitán de la marina con agujas clavadas en sus posaderas, con perdón, mi capitán.
- ¡Coño! ese soy yo.
- ¡Preparen los misiles, los cañones automáticos, las ametralladoras; perseguirles; destrozarlo todo: el mar, la costa, todo lo que se mueva...!
- ¿Y los atunes? mi capitán.
- Que se aparten los atunes.
- ¿Y a la Luna? mi capitán.
- A esa aún no, imbécil.
- ¡Fuego!
Texto: Dácil Martín
¡Pobres merluzas!
ResponderEliminar¿Nadie las avisará?
Fresco, fresco, fresco...
ResponderEliminarSe agradece un texto de este tipo, desencorsetado.
Ha sido muy divertido.
ResponderEliminarHay que reirse de la misma vida.
Saludos,
Anabel, la Cuentista
La risa casi siempre la asociamos a diversión, distracción o evasión de aquellas cuestiones que nos agobian. En este texto, como si fuese una caricatura, nos reímos, nos divertimos y antes de que los labios pierdan la curvatura de la sonrisa estamos pensando, reflexionando sobre problemas actuales, conflictos, dándonos cuénta que también somos protagonistas de esa caricatura.
ResponderEliminarExcelente Dácil.
Gracias a todos. La verdad es que me he divertido mucho escribiéndolo. Ha sido a raíz de una noticia que salió en la prensa. El ataque de los piratas somalíes a un buque de la armada de EEUU es cierto, ocurrió hace unos días.
ResponderEliminarQué bueno poder reír un rato!
ResponderEliminarEstupendo, Dácil.
Por cierto, la ilustración es estupenda, también
Gracias por amenizar el día con un cargamento de humor y picardía. Saludos y exito en sus escritos
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