21 octubre, 2010

Insomnio



Egipto es un lugar que nunca soñé, ni imaginé sus desiertos bajo el Sol, sus babosas serpientes moviéndose entre la arena o los cocodrilos verdosos y vigilantes entre el limo. No sé por qué me faltaron sueños que soñar y engullir el mundo, devorándolo insaciablemente, como un niño hambriento sin ojos. Las líneas que hieren el aire de cristal siempre me han sorprendido, creo que sólo yo las veo, como se aproximan despacio, como una leve caída. Soñar…sólo soñar, eso nos hace fuertes, como si fuera vivir, pero con nuestras propias normas, casi como si fuéramos dioses. En definitiva ¿no somos un antojo de los dioses? Somos sus sueños. Soñar es una magia, como volar sin cerrar los ojos; es el vientre de donde salen las palabras que se dibujan en el papel y que nos cuentan historias, penas o celebramos con ellas los triunfos en el amor y en las guerras. Soñar es como descolgar el teléfono y hablar con quien quieras, no importa que ya estén muertos, hablar y hablar sin dejar de reír; y si quieres puedes pintar el aire de azul, a mi me gusta el verde, aunque no es tan fresco, huele a menta. Pero tienes que tener cuidado, te lo pueden robar. Los ladrones de sueños te lo extraen, a veces tiran muy fuerte y te hacen daño. Yo los odio. No me gustan sus caras, aunque a veces se disfracen de mujeres guapas, se creen que nos engañan. Ya no quiero que me roben ni que me hagan daño ¡Malditos psiquiatras! Ya he decidido dejar de soñar, ahora vago por las noches. Eso no me disgusta, al contrario, es divertido, anoche estuve en Egipto…

11 comentarios:

  1. Soñar, que no lo roben, malditos psiquiatras, menos mal que escribes insomnio, Marcos, y sueñas por los demás porque es grande este sueño que cuentas, donde cabemos el resto.

    ResponderEliminar
  2. Efectivamente, un buen sueño... a pesar de esos psiquiatras. Hoy has soñado con Egipto, quizá mañana sueñes con La Atlantida o con Oniria, país de los sueños.

    ResponderEliminar
  3. Mi color es el rojo obviamente...y muchas noches vago por Turquía.

    Un abrazo Marcos.

    ResponderEliminar
  4. Que no nos roben los sueños, ni nos quiten la fantasía, ese es nuestro alimento, lo que nos permite escribir.

    ResponderEliminar
  5. Sí, Dácil, en los sueños cabemos todos y nos encontramos. Creo que una de las cosas más hermosas que tienen los sueños es que pueden ser compartidos.

    Amando, con la Atlántida he intentado soñar pero siempre termino mojándome. Intuyo que me gustará Oniria, lo consultaré en mi agencia de viajes.

    Sin embargo,Flamenco, Turquía me encanta, aunque no haya estado he sentido su calor, la humedad en sus cisternas subterráneas o el olor de sus calles más comerciales.

    Cierto, Inma, de ocurrir moriríamos de hambre y pena.

    ResponderEliminar
  6. Muy bueno el final. ¡Qué se atreva alguien a robarnos nuestros sueños! Es lo único que realmente nos pertenece.
    Ayer soñe que soñaba...
    Besos que ayuden a soñar con lo que quieras.

    ResponderEliminar
  7. Me apunto a esos sueños. Para siempre soñando, no hay nada mejor.
    Muy bueno

    ResponderEliminar
  8. Si, Isolda, cuánta razón tienes, no sé como pudo olvidárseles a los revolucionarios norteamericanos y franceses, allá por el siglo dieciocho, incluir el derecho y la libertad a soñar en sus famosas Declaraciones.

    ResponderEliminar
  9. Eso Ana, en realidad los sueños son borradores, luego sólo queda llevarlos a la realidad.

    ResponderEliminar
  10. Cierto, Marcos, soñar es mágico, pero ojo con creerse los sueños, eso es un delirio y lleva tratamiento psiquiátrico. Son buenos borradores de historias: primero se sueñan, se fantasean, luego se trabaja y se realizan. Siempre es así, y si no, se escriben.
    Un beso

    ResponderEliminar
  11. Aunque también es cierto, Angeles, que para muchos es casi la única escapatoria, soñar y engañarse, antes que abrir los ojos y ver una realidad asfixiante. De hecho, cuando dejan de soñar solo les quedan un paso, el que les separa del abismo.

    Gracias Angeles, un abrazo.

    ResponderEliminar

Gracias por contribuir con tus comentarios y tu punto de vista.

Los componentes de La Esfera te saludan y esperan verte a menudo por aquí.

Ésta es tu casa.