Me gusta volver a ti cuando todos han pasado, cuando no hay nadie, cuando incluso tu presencia se ha convertido en un lejano recuerdo. En ese silencio puedo acercarme libremente a tu escritura y dejarme envolver por tus susurros más delicados. Desde esa intimidad, cuando nadie me ve, cuando nadie nos ve, me es mucho más fácil despojarme de los prejuicios y contemplar el desnudo integral al que someten tus intenciones.
En esa contemplación es posible percatarse de la forma en que te desnudas a cada verso, de la forma en que muestras partes íntimas y desconocidas de tu esencia. Ahí es posible alcanzar una contemplación profunda de la belleza más admirable, en una forma de vida completamente distinta. Ahí… el alma se prepara para recibir la caricia más delicada…
Hola a todos, hace tiempo que no os dejo ninguno de mis escritos en vuestro fenomenal blog. Aquí os dejo la última entrada de mi blog. También os quería felicitar por el magistral trabajo que hacéis con vuestra Revista. El número dos es genial, aunque he de reconcoer que el número uno me llegó algo más, al tener una temática más amplia. Os envié dos textos para que estudiaseis si podrían aparecer en este último número, pero me ahora me doy cuenta que al tratarse de dos breves ensayos descriptivo-reflexivos sobre temas ajenos al relato, se salián totalmente del contenido de este número.
ResponderEliminarEn cualquier caso, reitero lo dicho, ¡¡enhorabuena por la labor de difusión cultural que hacéis y un fuerte abrazo a todos!!
Rubén.
Por lo que uno pueda tener de poeta, por las hermosas palabras que dices, muchas gracias.
ResponderEliminarMuchas gracias por esta idea que a veces se olvida. La poesía no es la portada de los periódicos, ni siquiera la úlitima página. La poesía no forma parte de la actualidad, sino de la vida. A la poesía no se va, se vuelve.
Admirable tu forma de decribir la poesía. De frente, en solitario. Me ha gustado mucho. Reitero las palabras de Amando. La poesía forma parte de la vida y a ella no se va, se vuelve.
ResponderEliminarBuen trabajo Rubén.
Armando, gracias por tus preciosas palabras. Y en ocasiones... la poesía se queda, como parece ser tu caso.
ResponderEliminarUn abrazo,
Rubén.
Isolda, gracias a ti también por tus hermosas palabras, que caminaron hacia mi emotividad.
ResponderEliminarUn abrazo,
Rubén.
Qué bello texto, Rubén, invita a dejarse acariciar.
ResponderEliminarÁngeles, me emociona hacer sentir semejantes experiencias.
ResponderEliminarMr. Mc. Donald, voy a tu blog y gracias por pasar por el mío.
ResponderEliminarSaludos!
Me ha gustado.
ResponderEliminarUn abrazo
Si en algún género el escritor se desnuda completamente es en la poesía. Al menos ese es mi caso.
ResponderEliminarSiempre se regresa a ella, no se sabe por qué, pero siempre hay una vuelta.
Saludos
Ana J., gracias por tu lectura.
ResponderEliminarUn abrazo.
Anabel, la poesía es un modo de escritura muy personal, muy especial, sumamente delicado. Ni siquiera todos la pueden leer.
ResponderEliminarEsa vuelta es una necesidad.
Saludos.