Soy un alcohólico cultural. Bebo todo aquello que encuentro. Bebo hasta cineB. Estoy resacoso de las mezclas. Intoxicado de tanto beber. No lo puedo dejar, tampoco quiero, ni lo intento.
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La literatura es vino.
La pintura el ron y el whiskie.
La poesía el coñac. Fuerte, emanante de aromas, te quema o te empalaga.
El cine champang. Espumoso, directo, fácil.
Teatro los licores. Sabrosos y no a diario.
La arquitectura como los cócteles… combinados perfectos, pura Alquimia.
La música es la cerveza y existe la negra (la clásica), la rubia (el pop)…
Los grafitties en paredes, drogas de diseño. Peligrosas e invasivas
Camino en un mundo de borrachos y no me relaciono con ellos. Solo con su creación. Apestados sociales. Soy un alcohólico cultural.
Texto: Francisco Concepción Alvarez
Me apunto al alcoholismo...
ResponderEliminarChapeau, mi querido e infiel alcohólico cultural.
ResponderEliminarPues sí, se te nota alcoholizado. Sin embargo, siempre he pensado que la borrachera facilita el acercamiento de los amigos, pues es un estado en el que se libera muchos de los perjuicios.
ResponderEliminarUn abrazo
Me encanta esa definición, "alcohólico cultural"...nunca se hubiera ocurrido y mira que tiene sentido eh?
ResponderEliminarUn abrazo