21 junio, 2010

El cantante cantó dos veces dos




Amó por igual las mujeres el ventilador el vino y el tumbar
Se deslizan las lágrimas disparadas desde el eje
Escándalo en Bogotá: todos los deportistas tienen el mismo nombre
Invento: el cielo con gramófono en la esquina de la novela rosa
El ciego: se rasca los peces de la entrepierna
Dinamo y Nebulosa: el Toro y el Picaporte
En lo cóncavo: un caño un ramo
El ojo de cristal: cae y tiene en el bombín
El velocista ya no corre
Meditación de motocicleta
Los aviones estallan sobre el mar pariendo bailarinas
Big-Bang, sí, maleducado como estas palomas blancas
Dolor de hueso de santo
Y vamos a vestir el almidón del cielo con lucecitas y vestidos nuevos y coquetos
Y todo el mundo quiere besar el espejo de tu pierna rota
¿Podré tocar con mi ala el ala delta de tu ala?
Sí, quisiera violar el secreto de dados del cielo.
¡Y que por ello me dieran dinero!

Calcula el calibre del aburrimiento
Calcula el calibre del aburrimiento
Calcula el calibre del aburrimiento


Autor del texto: Erik Hurtado Saura
Imagen tomada de Internet:
"Número 396". Antonio Lorenzo Carrión

 

2 comentarios:

  1. Bienvenido, Erik.
    No he entendido nada. ¿Podrías darme una pista?
    Saludos

    ResponderEliminar
  2. No hay nada que entender, al menos en este poema. No hay pistas, ni siquiera yo las tengo.

    Sólo son palabras copulando y saltando una encima de otra :)

    ResponderEliminar

Gracias por contribuir con tus comentarios y tu punto de vista.

Los componentes de La Esfera te saludan y esperan verte a menudo por aquí.

Ésta es tu casa.